La especialidad de Medicina Interna en España se realiza a través del sistema MIR (Médico Interno Residente), con una duración de cinco años. A diferencia del sistema formativo americano, de tres años, enfocada a ser un tronco común de todas las especialidades médicas, en España la Medicina interna es una de las especialidades más completas y transversales, dirigida al manejo integral de pacientes con patologías complejas y comorbilidades. La residencia de Medicina Interna en nuestro país es muy valorada por su formación sólida y su enfoque holístico en el paciente adulto. Al finalizar, los médicos pueden trabajar en hospitales como responsables de pacientes con diagnóstico desconocido, patologías multisistémicas o crónicas complejas, o dedicarse de una forma más específica a áreas como las enfermedades autoinmunes, infecciosas, minoritarias, riesgo vascular o insuficiencia cardíaca.
En nuestro servicio no solo se forman residentes propios de la especialidad —actualmente tres por año, a la espera de que se nos conceda una cuarta plaza—, sino que además acogemos de manera regular a residentes en formación de prácticamente todas las especialidades médicas. Estos médicos en formación realizan rotaciones en nuestro servicio, habitualmente durante los primeros años de su residencia, con estancias que suelen tener una duración aproximada de tres a seis meses.
Esta participación transversal en la formación de residentes de múltiples especialidades pone de manifiesto el papel estructural que desempeña Medicina Interna dentro del hospital, aportando una visión integral y polivalente que complementa la formación especializada de los MIR. Además, nos permite mantener una intensa actividad docente y una constante interacción con profesionales en formación, lo que enriquece el entorno clínico y docente de nuestro servicio.
Puede consultarse nuestro itinerario formativo en el siguiente link: